Desarrollo de la identidad visual de la nueva revista "La Gallina Ciega", que pretende exponer a nuevos jóvenes artistas, con el objetivo de promover la nueva cultura emergente. Una revista que no está enfocada en lo comercial o atractivo , sino que sirve como homenaje y reconocimiento para todos aquellos que forman parte de este movimiento. Partiendo desde la capital, este primer volumen rediseña un cuadro de Goya retratando el Madrid antiguo.

La Gallina Ciega es una revista cultural concebida como una plataforma para visibilizar a jóvenes artistas emergentes en disciplinas como la música, la danza y la literatura. Un proyecto editorial que mezcla contenido inédito con diseño gráfico experimental, ofreciendo un espacio donde el arte contemporáneo se encuentra con las nuevas narrativas urbanas.

‍Este primer número se sitúa en Madrid y toma como referencia simbólica el cuadro homónimo de Goya, reinterpretando su mensaje y trasladándolo a la realidad de una generación que busca su lugar entre incertidumbres, pasiones y búsquedas personales. La portada, protagonizada por una figura con los ojos vendados, evoca ese juego entre ceguera e intuición creativa que guía tanto a artistas como lectores.

A nivel visual, La Gallina Ciega se apoya en fotocomposiciones, ilustraciones propias y un lenguaje gráfico dinámico, fiel a las tendencias contemporáneas del diseño editorial. Cada detalle desde la maquetación hasta los recursos gráficos fue pensado para generar una lectura fluida, estimulante y con identidad propia.

Más que una revista, este proyecto editorial es un manifiesto visual: una declaración de intenciones en favor del arte joven, del riesgo creativo y del diseño como herramienta para amplificar voces que aún no han sido escuchadas.